Aprendiendo del 2008

El año 2008, y como ha sido la tónica de los años anteriores, las luchas y protestas estudiantiles, tanto en la región como a nivel nacional, se han centrado en demandas económicas y académicas, lo que denota claramente que no existe un movimiento estudiantil conformado como tal, sino que en su lugar hay algo mas parecido al gremialismo atendiendo solo pequeñas reivindicaciones, lo que deja de lado el problema y las contradicciones fundamentales de le educación que radican en el modelo económico capitalista, generando una educación que lo reproduce fielmente, mas allá del precio de este servicio o de los problemas académicos generados, que dicho sea de paso son innegables.

La UCT una vez más no es la excepción, el año pasado tuvimos una “época de movilizaciones” en la que la mala organización y la división fueron características principales, propiciadas por oportunismos individualistas de algunos sectores. En este ambiente y “para variar”, el campus norte, en ese entonces solo la Facultad de Recursos Naturales, se suma a las movilizaciones al termino del proceso, eso tal ves por el aislamiento físico que siempre ha sido un obstáculo para mantener a los estudiantes informados de los hecho que ocurren y por lo tanto obstáculo también para propiciar su organización.
Por otro lado, si bien el campus norte logra movilizarse, lo hace de manera débil y desinformada, problemas que hacen difícil que un numero considerable de estudiantes estén concientes y comprometidos con las luchas. Cada carrera tiene sus propios problemas, Agronomía se suma con un numero de estudiantes demasiado bajo al igual que Forestal, Veterinaria con una participación caracterizada por el individualismo y oportunismo, levanta un petitorio paralelo al de la Universidad con reivindicaciones económicas y académicas aprovechando el trampolín que significa que gran parte de las carreras estén movilizadas y luego se baja con el pretexto de haber conseguido sus objetivos y Acuicultura se suma tarde, aunque con un poco mas de fuerza pero con los mismos con los mismos problemas organizativos y de información que se evidencian a nivel de Universidad, lo que hace que en las asambleas se discuta sobre los compañeros que están entrando a clases a pesar de el paro acordado en vez de discutir sobre el fondo del problema educacional y crear tácticas y estrategias de organización y movilización destinados a construir un movimiento estudiantil para, con y entre todos y todas.
El problema grave y como ya es costumbre viene a la hora de mantener la movilización de pie, con estudiantes unidos y cohesionados entre si, comienzan a bajarse carreras una a una, situación que crea una decepción, en la masa estudiantil que ve como una vez mas el proceso se deshace gracias a dirigentes que traicionan la voluntad de los estudiantes, decisiones mal tomadas y por supuesto la represión de la Universidad hacia los estudiantes que intentan organizarse.
Todo este caos en las movilizaciones hace que al final de cuentas quienes se organizan concientemente y desean luchar en serio sean minoría, situación que complica tener un discurso hegemónico a la hora de las discusiones y a la hora de defender la postura de los estudiantes ante quien quiera destruir su organización.
Aunque las movilizaciones, como ya hemos explicado, tuvieron mas de una falencia, el lado positivo que vale la pena reconocer es el nuevo tipo de organización gestado en el Campus Norte que logró articularse como Asamblea de Facultad, instancia organizativa que creemos debe seguir impulsándose en futuras movilizaciones, ya que permite contar con un campus que puede unir fuerzas de sus carreras, plantear actividades en común y por lo tanto tener algo mas que decir y aportar a la lucha de los estudiantes teniendo una postura clara y única logrando su unificación.
Creer en este tipo de organización nos llevó a conformarnos como el Colectivo de la Facultad de Recursos Naturales integrado por estudiantes de todas las carreras de esta, reconociéndonos como compañeros en la lucha hacia la creación de un real movimiento estudiantil en la UCT y en el país.